Siempre estás en mi mente
como un pensamiento de dolor.
Causando mil tristezas.
Abriendo aquel hueco
que dejo tu adiós.
Muriendo por dentro
rasgándome el alma,
llorando de angustia.
Regresó aquel instante.
Aquel triste día
cuando te fuiste sin un adiós.
Se cerraron tus ojos, se disipo tu luz,
tu sonrisa contagiosa, se silencio
y tu voz arrulladora, se extinguió
Mil sueños se apagaron ese día,
dejando vacío y dolor en mi corazón.
Tendrá fin el mundo,
pero tu recuerdo seguirá grabado en mí.
Estarás presente en cada segundo,
en la alegría y en la tristeza
en los aplausos y fracasos.
Estas conmigo, porque eres parte de mi
y nuestro amor nunca tendrá fin.
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